Siempre hay cosas que piensa tu pareja y que, en realidad, no se atreve a decirte. En lo relacionado con el sexo, aún más. No existe un hombre en el mundo que sea capaz de ser totalmente sincero a su pareja en materia sexual. Todos esconden deseos ocultos de los que, en mayor o menor medida, se avergüenzan. En unos caspas porque la relación no está lo suficientemente asentada, en otros porque se temen herir a la pareja y, en toros, porque, realmente, se trata de perversiones que mejor no sean conocidas por el mundo civilizado.
Una de las cosas que piensa tu pareja y que, probablemente, no se atreva a decirte, especialmente si la relación acaba de empezar es que tengas algo de iniciativa. Puede que la mayoría de las mujeres tengan, por cuestiones sociales, interiorizada la sensación de que es el hombre el que debe dar el primer paso para iniciar una sesión de sexo. Sin embargo, eso no tienen por qué ser así. Es más, resulta tremendamente excitante para los hombres el hecho de que sea la mujer quien tome la iniciativa y, para las mujeres, asumir ese rol también les suele reportar un extra de placer.
Otra de las cosas que piensa tu pareja y que, probablemente, no se atreva a decirte es que le gustaría saber de primera p¡mano que cosas son la que más te gustan en la cama. Vamos, que nada le gustaría más que el hecho de que le contases qué cosas te excitan más para ponerlas en práctica. Al final, como no puede ser de otra manera, el placer absoluto de uno de los participantes sólo puede tener lugar si también lo alcanza tu compañero de experiencias. No resulta extraño, por lo tanto, que sea otra de las cosas que anhele tu pareja.
Bueno, y en el caso de todos los hombre del mundo, se repite un deseo sexual de forma inalterable. Las ganas de practicar sexo con dos mujeres a la vez es común a los hombres de todo el mundo, independientemente de su realidad social, cultural, económica o religiosa. Otra cosa es que se atreva a proponértelo.