El bloqueo sexual, en ocasiones, aparece de forma abrupta en nuestra vida. Siempre que esto sucede, aprese de una forma inoportuna y, en chuchas ocasiones, no somos capaces de localizar cuál es el motivo por el que eso sucede. De pronto, nos vemos con un nivel de la libido mucho mas bajo que de costumbre pero no somos capaces de identificar que es lo que ha sucedido y por qué. Sin embargo, en la gran mayoría de las situaciones en que esto sucede, el bloqueo sexual, casi siempre, responde a algunas de las situaciones que vamos a enumerar.
El uso de pastillas anticonceptivas es una de los principales motivos en los que aparece el bloqueo sexual en las mujeres. Parece que cuando una mujer comienza a ingerir estrógenos de forma oral, la testosterona, también conocida como hobremoda del deseo, disminuye y, con ella, una parte muy importante de la libido.
El estrés producido por el trabajo, los conflictos que la propia pareja genera, la familia en general o cualquiera de las situaciones que la actual forma de vida que llevamos provoca, pueden estar en le origen del bloqueo sexual que sientes pero no eres capaz de identificar. El estrés en neutro organismo hace que aumente el cortisol, hormona que hace que disminuya la producción de testosterona.
La ingesta excesiva de alcohol , drogas o una combinación de ambas resultan totalmente determinantes en muchos casos para se se produzca el temido bloqueo sexual. Es común pensar que el uso del acohol o drogas ayuda a desinhibirse y, por lo tanto, a tener un mayor acceso al mundo de las relaciones sexuales. Sin embargo, esto no es así. En realidad, el uso de alcohol y drogas no sólo no ayudan sino que, en muchas ocasiones, hacen que sea imposible el encurto sexual. En la mayoría de las ocasiones sólo sirven para frustrarlo.
El bloqueo sexual también puede estar causado por enfermedades, el uso de determinados medicamentos, cuestiones como la falta de comunicación de la pareja, el propio aburrimiento o, incluso, la baja autoestima. Lo recomendable, en cualquier caso, es acudir a un médico especialista en cuanto se hagan presentes los primeros síntomas.