La belleza vaginal

La belleza vaginal es una de las muchas tareas en las que las mujeres de hoy en día ocupan su tiempo. De la misma manera que hacemos verdaderos esfuerzos en hacer que nuestra piel de la cara, por ejemplo, se muestre tersa y suave o que tratamos de hacer que nuestro cabello se vea sedoso y desenredado, determinadas mujeres invierten tiempo, dinero y esfuerzo en cuidar otras zonas de su cuerpo tal vez menos visibles en principio. A estas alturas, todos hemos oído hablar del blanqueamiento anal. Se trata de una técnica que hace que la zona que rodea al ano, generalmente ennegrecida con el paso del tiempo, recupere su tono blanquecino. También existen diferentes técnicas para mantener intacta la belleza vaginal.

Durante miles de años, las tradiciones de belleza en el lejano Oriente, desarrollaron técnicas que buscaban el rejuvenecimiento y salud de las zonas íntimas femeninas. Como podéis ver, no se trata de un invento moderno sino que desde tiempos inmemoriales, diferentes culturas han trabajado en el desarrollo de técnicas de belleza vaginal. Determinadas personas muy conocidas del mundo de la farándula practican algunas de estas técnicas. En su propio blog, la actriz Gwyneth Paltrow contaba cómo cuidaba su zona íntima con vapor y hojas de artemisa. los resultados, según ella misma afirma son sorprendentes.

Pero, además de cuidar la salud de la vagina, también podemos ponernos a trabajar en la belleza vaginal procediendo a utilizar diferentes técnicas decorativas diseñadas específicamente para la zona íntima. Existen, por ejemplo, unos diminutos cristales que sierren como adorno para la vagina. Cuando las combinaciones de este tipo de materiales se realizan con cariño y esmero, además de con buen gusto, los resultados suelen ser magníficos. Resulta muy recomendable para una ocasión especial.

Además, para seguir trabajando en la belleza vaginal podemos acceder a cientos de tratamientos cosméticos similares a los existentes para la cara, pero adecuados a esta sensible zona de la anatomía femenina. En casos muy extremos, por supuesto, siempre se puede recurrir a cirugías tales como al vaginoplastía o labioplastía. Sin embargo, es recomendable pasar por un especialista antes de decidir someterse a este tipo de intervenciones mucho más delicadas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

INFORMACIÓN BÁSICA SOBRE PROTECCIÓN DE DATOS

Finalidad: Publicación de comentarios. Legitimación: Usted consiente el tratamiento de sus datos para las finalidades indicadas. Destinatarios: No tenemos previsto ceder sus datos a terceros, salvo por obligación legal. Plazos de conservación: Los datos proporcionados a través de este blog serán conservados mientras exista un interés mutuo. Derechos: Tiene derecho a acceso, rectificación, supresión, portabilidad y oposición, como se explica a continuación. Información adicional: Puede consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos como se explica en nuestra Política de Privacidad.