La sexualidad inteligente y la autoestima van unidos. De hecho, se trata de dos variables directamente proporcionales. Si una aumenta, la otra también. Hay èrsonas que tratan de llevar una vida sexual abierta y otros que la prefieren más cerrada. Sin embargo, existe otr gran grupo que incluye a la spersonas que optan por investigar, por buscar nuevos caminos en el campo de la sexualidad. Sea cual sea la opción que una persona decide elegir, por le motivo que sea, resulta imprescindible hacerun usao inteligente de esa opción. Resulta imprescindible usar lo que deneminamos sexualidad inteligente.
La relación entre la sexualidad inteligente y la autoestima es directa. Precisamente por eso resulta imprescindible entender que todos los factores reslacionados con el sexo además de un componente meramente sexual, conlleva una serie de componentes emocionales que no se pueden separar facilmente del primero. Evidentemente, unos son positivos y otros negativos. La intensidad con que cada uno vivelas situaciones que se generan a raiz de ellos tienen una consecuencia fundamental en nuestra autoestima.
En general, la educación sexual que predomina en neustra sociedad no es demasiado buena De hecho, durante siglos se ha tratado de cerrar los ojos a las realidades propeustas por las diferentes sexualidades y a las formas de entenderlas. Por supuesto, no pudieron acabar con ella a pesar de los ataques, pero el precio que pagamos por esta persecución de siglos es una escasa educación sexual en general que conlleva el poco uso de una sexualidad inteligente y, por lo tanto, que influya positivamente en neustra autoestima.
No hay una situación que produzca un mayor incrementeo en la autoestima de una persona que la de sentirse deseado sexualmente. Precisamente, una de las funciones de la sexualidad es precisamente ésa. Provocar mecanismos que nos hagan sentirnos mejor con nosotros mismos y, por lo tanto, con el mundo que nos rodea. La sexualidad inteligente, sin duda, es el mecanismo que nos acerca a difrutar de esta situación. Al final, como en casi todo, el aprendizaje contínuo y la búsqueda de los elementos que favorecen nuestra sexualidad son las únicas cosas que nos acercarán a alcanzar este objetivo.