El sexo por la mañana es, sin ningún género de dudas, una forma excelente de comenzar el día. De la misma manera que un buen desayuno es la mejor manera de cargar energías para luego quemar a lo largo del día, desde el punto de vista de la autoestima, la satisfacción personal y la posibilidad, no hay mejor forma de activarse que con una buena sesión de sexo. El sexo por la mañana, el denominado coloquialmente «sexo mañanero», es siempre una excelente idea.
Todos dedicamos, cada mañana, entre 10 y 20 minutos a pegarnos con la vocecita interior que nos dice que no nos levantemos, que nos sugiere excusas para poner en el trabajo y que nos permitan mantenernos en la cama un ratito más. Desde el momento en que suena el despertador, todos comenzamos a activar esa maquinaria que trata de evitar lo inevitable. Eso sí, cada uno lo hace a su manera. Unos lo hacen retrasando el despertador de 5 en 5 minutos. Otros lo hacen renegando en voz alta de su poca suerte. Cada uno a su manera, todos perdemos un tiempo desde que suena l alarma hasta que nos levantamos. ¿Y si utilizásemos ese tiempo para nuestro sexo por la mañana? Seguro que todo sería diferente.
Lo ciertos que, en el mejor de los casos, la cosa se nos podría ir de las manos y excedernos del tiempo que tenemos para remolonear. Aún si fuese así, no hay mejor motivo para un retraso en el trabajo que haber sido provocado por un ataque inesperado de libido. al menos eso es lo que yo pienso. El sexo por la mañana, aunque nos haga llegar tarde al trabajo, nos puede hacer enfrentarnos al día con energías renovadas.
Es más si, finalmente, el sexo por la mañana se convierte en un hábito para nosotros y parea nuestra pareja, podemos planearlo con antelación y despicare el tiempo que se merece. aunque tengamos que adelantar la hora del despertador, habría sido por una buena causa. Escuchar el sonido del despertador resulta inoportuno cuando te avisa de que tienes que ir a trabajar pero si de lo que te avisa es de que tienes que dar comienzo a tu sesión de sexo mañanero, la cosa cambia considerablemente. ¿No es así?